Estos días llevo dandole vueltas a los asuntos de cómo demoramos el proceso de entrar en otra mirada de lo que sucede, de los kilos de intelectualidad que muchos llevan encima y que con todo y eso no gestionan , no dan un paso firme y constante, es cómo volver una y otra vez al circulo, menos mal que quienes acompañamos en el camino llevamos la paciencia incorporada, el respeto al camino de cada cual , sin obligarlos pero si con la responsabilidad de hacerlos parte del proceso en el que viven para que se puedan liberar de lastres y descubran que aún están aquí, que eso ya es un regalo
Qué sucede cuando esbozamos razones tranquilizadoras, si como lo oyes razones frente a una equis situación
Soy así
Es el Sistema en el que vivimos
La culpa es de...
Es el tiempo que está muy malo
No puedo porque ella.....
Él no lo hace por.....
un largo etcetera que sólo demuestra lo aclimatados que estamos a la fuerza de gravedad que está fuera de nosotros , al final de todo esto el problema o situación sigue existiendo, no ha dejado de estar, nos tranquiliza estas respuestas como el placebo que tomamos para no trabajar en nosotros mismos , en nuestro adentro, pues eso nos lleva a quitarnos la piel, a dejar de ser el que conocemos y adentrarnos en hábitos , formas nuevas, recursos diferentes, esto nos lleva a ser parte de la solución,parte contribuyente de un resultado. No nos culpabilizamos, asumimos el poder que está en nuestras manos, comunicando el inconveniente y solicitando ayuda nos transformamos en protagonistas.
Obrar de esta forma también tiene un coste y se llama RESPONSABILIDAD.
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